El azul del mar, las playas de arena blanca y un soleado paisaje mediterráneo preparan el escenario para unas vacaciones de ensueño. Las Islas Baleares de España incluyen cuatro hermosas islas, cada una con un carácter propio. Mallorca tiene iglesias gloriosas, pueblos antiguos y monasterios inspiradores, así como orillas de arena prístina.
En cambio, Menorca ofrece una escapada tranquila para los amantes del mar y la naturaleza. Ibiza es famosa por su ambiente animado, así como por sus hermosas playas. El encantador casco antiguo de Ibiza, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, se encuentra entre los mejores lugares para visitar en España en busca de paisajes pintorescos. Para aquellos que aprecian destinos relativamente desconocidos, Formentera tiene una costa virgen y una reserva natural que esconde una de las mejores playas de las Islas Baleares.
Descubre las mejores cosas para ver y hacer en este popular destino con nuestra lista de atracciones en las Islas Baleares de España.

1. Eivissa: Patrimonio de la Humanidad
   Dalt Vila, es declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Encaramado en una pequeña montaña junto al mar y con vistas a la ciudad se encuentra el casco antiguo fortificado de Dalt Vila, un laberinto de estrechas calles adoquinadas, calles peatonales y casas históricas. Las fortificaciones de la villa se construyeron en el siglo XVI sobre los restos de las murallas moriscas, con tres puertas y siete baluartes en las esquinas. La puerta de entrada principal es la Puerta de las Tablas con el escudo de armas del rey Felipe II, y uno de los antiguos baluartes alberga ahora parte del Museo de Arte Contemporáneo. La Catedral de Nuestra Señora de las Nieves fue construida en los siglos XIII y XIV en el lugar de la Mezquita Yebisah, que data de la época del dominio islámico, por encima de todos los demás monumentos del esplendor del casco antiguo. Originalmente la catedral era gótica, pero fue renovada en el siglo XVIII en estilo barroco. Desde la terraza en el lado sur de la catedral, puede disfrutar de las maravillosas vistas de la bahía.
   
   
2. Palma de Mallorca
   En el corazón de la ciudad de Palma se encuentra la magnífica catedral del siglo XIV conocida como La Seu, el edificio más emblemático de la capital de Mallorca. La catedral se encuentra frente al Palacio Real de La Almudaina, originalmente una fortaleza árabe que fue convertida en palacio real para los Reyes Católicos. Un imponente edificio de piedra arenisca dorada que no puedes perderte, ya que es una de las estructuras góticas más altas de Europa, encaramada sobre el Parc de la Mar y una vista magnífica para quienes llegan por mar.
   La Lonja es el auténtico mercado de pescado en el puerto del casco antiguo, y también merece la pena visitarlo junto con la Plaza Mayor, la plaza principal del casco antiguo. Pasa por el laberinto de calles estrechas mientras exploras las encantadoras boutiques (especialmente en Carrer de Sant Feliu) y haz una parada en un café al aire libre para disfrutar de las agradables plazas de Mallorca. A unos 10 kilómetros de Palma de Mallorca, la Playa de Palma es una de las mejores en la isla con excelentes instalaciones. Cerca de ahi, se encuentra la Playa del Arenal, una extensa playa bordeada de palmeras junto a un puerto deportivo.
   
   
3. Isla de Formentera
   Catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el Parque Natural de Ses Salines es una reserva natural de la parte sur de la isla de Ibiza y el norte de la isla de Formentera. El 75 por ciento del parque natural cubre agua y contiene Posidonia, una planta acuática endémica que solo crece aquí. El otro aspecto del parque es el terreno (alrededor de 2.000 hectáreas) cubierto de salinas, humedales, dunas, playas y pinares. El Centro de Bienvenida del Parque Natural de Ses Salines se encuentra en Can Marroig en la isla de Formentera.
   La isla de Formentera cuenta con hermosas playas dentro del Parque Natural de Ses Salines. La playa más famosa de la isla es la Playa de Ses Illetes (a cuatro kilómetros de La Savina), ubicada en un lugar idílico con vistas al mar hasta la isla de Ibiza. Los visitantes quedan asombrados por el paisaje paradisíaco, con una costa de fina arena blanca y aguas translúcidas poco profundas que se asemejan a una piscina, por lo que es seguro para los niños. Las condiciones perfectas para nadar, hacer windsurf y navegar.
   
   
4. Mahón: Capital de la Isla de Menorca
   Mahón es una ciudad relajada con un ritmo pausado. Los visitantes pueden pasear por las pintorescas calles adoquinadas mientras admiran las vistas al mar. La Plaza de España es una espaciosa plaza de la ciudad, a la que se puede llegar a través de una escalera peatonal desde el puerto. Se ramifica en muchas calles llenas de tiendas, restaurantes y su mercado de pescado fresco (el Mercat del Peix). Una sección del mercado ofrece deliciosas tapas junto con un ambiente agradable.
   A solo unos pasos se encuentra la Iglesia del Carmen, una iglesia carmelita con un claustro contiguo. Hoy en día, las arcadas son el lugar donde se encuentra el mercado tradicional de la ciudad, el Mercat des Claustre. El bullicioso mercado abre todos los días de la semana, e incluye puestos de frutas, verduras, otros productos alimenticios, ropa, joyas y artículos típicos de Menorca. A principios de septiembre, Mahón celebra las Fiestas de la Mare de Déu de Gràcia de Maò. Fiesta alegre en honor a la Virgen de Gràcia, con desfiles, feria infantil, animación musical, bailes, fiestas callejeras y fuegos artificiales.
   

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